LA DANZA EN MESOPOTAMIA Y PERSIA
LA DANZA EN MESOPOTAMIA Y PERSIA
La cultura mesopotámica, entre los cauces de los ríos Tigris y Eúfrates entre VII milenio y el IV siglo, comprende varias civilizaciones con una misma tradición artística de gran nivel, también con importante nivel intelectual. Pero debido a los materiales que empleaban no ha quedado constancia ni escrita ni plátic.
En la civilización de Sumes, 3500 aC la danza estaba ligada a la religiosidad, y los dibujos en cerámicas, estatuillas o sellos nos muestran un rico, pero incompleto panorama de danza.
Las primeras muestras escritas en el III milenio aC describen la danza como reflejo de la vida de la gente y era usada en rituales mágicos y en la adoración de los dioses. Por medio de los efectos mágicos de la danza los humanos se adentraban en el mundo de los dioses que controlaban las fuerzas de la naturaleza para ganar su favor, tener éxito, propiciar la lluvia o mejorar la vida en el más allá entre otros.
Los bailarines eran hombres magos y bailaban en grupos, desnudos en los templos para simbolizar la pureza. En las representaciones primeras también aparecen mujeres bailando vestidas realizando danzas circulares con las manos unidas y subiéndolas y bajándolas para propiciar las lluvias como aparece en una urna de cerámica neolítica encontrada en Mesopotamia. Si bailaba desnuda aparecía con un triángulo en sus partes púbicas.
Hasta el 3000 aC los bailarines aparecían con las cabezas cubiertas por máscaras de animales o pájaros que los cubrían también el torso. En la danza predominaba el simbolismo, donde las poses tenían su significado.
La música y la danza estaban unidas por su importancia, y por el papel que desempeñaban en la adoración y en la magia, ya que eran los principales componentes de las grandes ceremonias. En el II milenio aC la danza empieza a introducir componentes extrangeros por el contacto con las culturas Egipcia, Siria y Pérsica. En esta época los bailarines, hombres jóvenes y entrenados, se formaban con los músicos acróbatas y luchadores de los templos. La danza era muy demandada y solo la realizaban los profesionales. También había bailarines importantes con habilidades especiales.
Tenemos evidencia de danzas individuales, en grupo, luchas y acrobacias, de humanos con animales y de animales adiestrados con acompañamiento de percusión, cuerda y viento. Al mismo tiempo que fue evolucionando la civilización mesopotámica también lo hizo la danza.
LA DANZA EN EL PUEBLO HEBREO
El pueblo Hebreo conoció las danzas sagradas a partir de su cautividad en Egipto.
En la Biblia podemos encontrar fragmentos que revelan la existencia de danzas hebreas de carácter religioso que expresaban veneración y reconocimiento hacia la divinidad. En el Éxodo es donde se menciona la danza por primera vez:
“ María, la profetisa, hermana de Arón, tomó en sus manos un tímpano, y todas las mujeres seguían en pos de ella con tímpanos y danzando”.
Poco después encontramos a los hebreos danzando alrededor del altar levantando por Arón al becerro de oro.
También hallamos danzas ligadas a acontecimientos políticos o militares: como danzas solemnes para celebrar hechos históricos o victorias sobre el enemigo.
Tenían tres principales fiestas anuales que siempre iban acompañadas con danzas:
La primera en Abril: conmemoraba la salida de Egipto y la llegada de la primavera.
La segunda en Junio: dar como ofrenda a Dios los primeros frutos del verano y rememorar la promulgación de los 10 mandamientos de Sinaí.
La tercera en Septiembre: la fiesta de los Tabernáculos, después de las cosechas, servía para agradecer a Dios sus favores.
Trabajo realizado por Noemí Castillo, Marta González y Elena González. Octubre 2019.
La cultura mesopotámica, entre los cauces de los ríos Tigris y Eúfrates entre VII milenio y el IV siglo, comprende varias civilizaciones con una misma tradición artística de gran nivel, también con importante nivel intelectual. Pero debido a los materiales que empleaban no ha quedado constancia ni escrita ni plátic.
En la civilización de Sumes, 3500 aC la danza estaba ligada a la religiosidad, y los dibujos en cerámicas, estatuillas o sellos nos muestran un rico, pero incompleto panorama de danza.
Las primeras muestras escritas en el III milenio aC describen la danza como reflejo de la vida de la gente y era usada en rituales mágicos y en la adoración de los dioses. Por medio de los efectos mágicos de la danza los humanos se adentraban en el mundo de los dioses que controlaban las fuerzas de la naturaleza para ganar su favor, tener éxito, propiciar la lluvia o mejorar la vida en el más allá entre otros.
Los bailarines eran hombres magos y bailaban en grupos, desnudos en los templos para simbolizar la pureza. En las representaciones primeras también aparecen mujeres bailando vestidas realizando danzas circulares con las manos unidas y subiéndolas y bajándolas para propiciar las lluvias como aparece en una urna de cerámica neolítica encontrada en Mesopotamia. Si bailaba desnuda aparecía con un triángulo en sus partes púbicas.
Hasta el 3000 aC los bailarines aparecían con las cabezas cubiertas por máscaras de animales o pájaros que los cubrían también el torso. En la danza predominaba el simbolismo, donde las poses tenían su significado.
La música y la danza estaban unidas por su importancia, y por el papel que desempeñaban en la adoración y en la magia, ya que eran los principales componentes de las grandes ceremonias. En el II milenio aC la danza empieza a introducir componentes extrangeros por el contacto con las culturas Egipcia, Siria y Pérsica. En esta época los bailarines, hombres jóvenes y entrenados, se formaban con los músicos acróbatas y luchadores de los templos. La danza era muy demandada y solo la realizaban los profesionales. También había bailarines importantes con habilidades especiales.
Tenemos evidencia de danzas individuales, en grupo, luchas y acrobacias, de humanos con animales y de animales adiestrados con acompañamiento de percusión, cuerda y viento. Al mismo tiempo que fue evolucionando la civilización mesopotámica también lo hizo la danza.
LA DANZA EN EL PUEBLO HEBREO
El pueblo Hebreo conoció las danzas sagradas a partir de su cautividad en Egipto.
En la Biblia podemos encontrar fragmentos que revelan la existencia de danzas hebreas de carácter religioso que expresaban veneración y reconocimiento hacia la divinidad. En el Éxodo es donde se menciona la danza por primera vez:
“ María, la profetisa, hermana de Arón, tomó en sus manos un tímpano, y todas las mujeres seguían en pos de ella con tímpanos y danzando”.
Poco después encontramos a los hebreos danzando alrededor del altar levantando por Arón al becerro de oro.
También hallamos danzas ligadas a acontecimientos políticos o militares: como danzas solemnes para celebrar hechos históricos o victorias sobre el enemigo.
Tenían tres principales fiestas anuales que siempre iban acompañadas con danzas:
La primera en Abril: conmemoraba la salida de Egipto y la llegada de la primavera.
La segunda en Junio: dar como ofrenda a Dios los primeros frutos del verano y rememorar la promulgación de los 10 mandamientos de Sinaí.
La tercera en Septiembre: la fiesta de los Tabernáculos, después de las cosechas, servía para agradecer a Dios sus favores.
Trabajo realizado por Noemí Castillo, Marta González y Elena González. Octubre 2019.
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